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Santillán Sánchez, Guadalupe
2004 Intercambio comercial de moluscos: Sitios Pozas de Ventura y Salto Grande, Campeche, México. En XVII Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 2003 (editado por J.P. Laporte, B. Arroyo, H. Escobedo y H. Mejía), pp.1029-1036. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala.
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INTERCAMBIO COMERCIAL DE MOLUSCOS:
SITIOS POZAS DE VENTURA Y SALTO GRANDE,
CAMPECHE, MÉXICO
Guadalupe Santillán Sánchez
Durante las diferentes temporadas de campo del Proyecto de Investigación Arqueológica en Candelaria, Campeche: Sitios Pozas de Ventura y Salto Grande, se logró recuperar materiales arqueológicos de concha. Pese a no ser muy abundantes, estos materiales han sido muy valiosos ya que han indicado posibles intercambios comerciales de productos con otras comunidades, además de algunas costumbres funerarias y de edificación.
LOS MATERIALES Y SUS CONTEXTOS
En primer lugar, los materiales de concha fueron identificados por Clase, Familia, Subfamilia y Género, lo que ha permitido conocer su lugar de origen (Cuadro 1; Figuras 1 a 6). Dichos materiales se recuperaron tanto en superficie como en excavación. Los materiales de recorrido fueron recolectados durante la primera temporada de campo en el sitio de Salto Grande Rancho Sur, la cual se llevó a cabo en 1999. En la Estructura 1 de este sitio se recuperó un pendiente de concha, el cual pudo ser un objeto que se usó para ser suspendido por medio de un cordón o hilo. Dicho pendiente corresponde a un univalvo, cuyo género y familia no se pudo identificar, ya que fue modificado hasta llegar a tener una forma rectangular, perdiéndose por tanto las características originales que pudieran permitir su identificación.
En las diferentes unidades de excavación, efectuadas durante la temporada de 2000, se obtuvieron objetos de concha asociados a varios contextos arqueológicos, como rellenos de estructuras y ofrendas en las mismas, así como a parte del ajuar funerario en los entierros descubiertos. También se recuperaron otros materiales en forma de pendientes en las unidades de excavación 1, 2, 3 y 4, tanto en estado natural como modificados (Cuadro 2).
Unidad 1
El número total de objetos de concha recuperados en Salto Grande fue 18, dos de los cuales fueron recuperados en la Unidad 1. Así, en el pozo 3 de la capa III se descubrieron un par de objetos que al parecer corresponden a sendos especimenes de Gasterópoda Olivella, que habita naturalmente en la laguna.
Unidad 2
Un solo objeto procede de la Unidad 2. Esta excavación se realizó en la Estructura 2, que reveló una ofrenda que constó de tres vasijas y un caracol (Objeto 3), al pie de las escalinatas, de la cual provino el cuadro N1W10, capa III. El caracol pertenecía a la clase Cephalopoda, de la subfamilia Cephalopoda, y se descubrió en el pozo 3, capa III, debajo de una olla globular. No presentaba modificación cultural.
Clase
Familia
Subfamilia
Géneros
Total
Gasterópoda
Auto morfa
Gasterópoda
Oliva
3
Olivella
3
Cephalopoda
Caracol
2
Pelecípoda
Auto morfa
Pelecípoda
Ostrea
5
Tapes
6
Total general
19
Cuadro 1 Identificación de los materiales de concha
Figura 1
Figura 2
Figura 3
Figura 4
Figura 5
Figura 6
Unidad 3
En cuanto a esta excavación se detectó el Entierro 2, el cual presentaba una ofrenda de vasijas y de cinco bivalvos en forma natural, así como uno más trabajado en forma de pendiente. Los bivalvos correspondían a la clase Pelecípoda, del género Ostrea. El pendiente presentaba un orificio cónico y fue identificado como la clase Gasterópoda, del género Oliva.
Unidad 4
En esta unidad se recuperaron nueve materiales de concha en total, dos de los cuales presentaban modificación cultural. Dichos materiales fueron descubiertos en la capa que correspondía al derrumbe de la Estructura 12. Como se observa en el Cuadro 1, los materiales recuperados corresponden a la clase Gasterópoda, género Oliva, y fueron preparados por medio de corte burdo en el ápex. Además, se les hizo una perforación en forma de acanaladura de paredes divergentes y fondo cóncavo.
Elemento 1
En la ofrenda denominada como Elemento 1, se identificaron varios artefactos cerámicos junto con dos objetos de concha natural, los cuales corresponden a la clase Pelecípoda, del género Tapes. Los cinco materiales restantes corresponden a la clase Pelecípoda, géneros Tapes y Ostrea, los cuales se identificaron en los sedimentos del derrumbe.
U.E.
C.d./ Asociación
Cp
Tipo
Total general
Natural
Pendiente
1
Pozo 3/ Sedimento
III
2
3
2
N1W10/ Elemento 2
III
1
1
3
N15W17/ Entierro 2
I
5
1
6
4
S219E33/ Sedimento
I
1
1
S224E32/ Sedimento
I
1
1
S224E35/ Elemento 1
II
2
2
S224E36/ Sedimento
II
1
1
S224E39/ Sedimento
I
1
1
S224E40/ Sedimento
II
1
1
S226E33/ Sedimento
I
1
1
S234E32/ Sedimento
I
1
1
Total general
15
3
19
Cuadro 2
TÉCNICAS DE TRABAJO
Técnica de Preparación
Percusión: técnica utilizada como etapa preliminar con el propósito de obtener un fragmento. Una variante de esta técnica es el picoteo, el cual se utiliza para redondear la cuenta, preparar la superficie donde se podría el perforador y en la fase inicial para el grabado (Olmedo y González 1986).
Presión: consiste en astillar el objeto apoyándolo sobre una herramienta de mayor dureza, por medio de un punzón de hueso o madera.
Técnica de Manufactura
Corte: se logra mediante desgaste por aserrado y puede ser por dos variantes, con cordel o con cuñas.
Perforación: para perforar se utilizaba un instrumento de hueso, madera o mineral (cuarzo o jade enmangados). En ocasiones las perforaciones son tan delgadas que sugieren el empleo de cactus. La perforación es hacer un agujero que puede tener una forma bicónica (se presenta de ambos lados) o cónica (de un sólo lado), realizándose antes de la abrasión.
Técnicas de acabado: consisten en el desgaste, en el cual se frota la pieza contra una superficie rugosa de mayor o menor dureza que la misma pieza. El lubricante que se utiliza es líquido. Entre las técnicas que se observan están:
1. Abrasión: se utilizaban placas de material abrasivo grueso (arena dura) con el propósito de darle forma al objeto por medio del desgaste.
2. Pulido: abrasión más fina dándole un acabado de brillo y alisado.
3. Bruñido: proceso final que se utiliza material suave como telas o pieles.
4. Técnica de decoración: a) pintado utilizando colores minerales, animales o vegetales; b) inciso utilizando un buril de material mas duro sin abrasivos que dejan líneas estrechas con bordes y depresiones irregulares.
INTERCAMBIO COMERCIAL
Es de suponerse que los objetos de concha descubiertos por el Proyecto de Investigación Arqueológica en Candelaria, Campeche: Sitios Pozas de Ventura y Salto Grande, provienen de la Costa del Golfo, posiblemente de la Laguna de Términos. En primer lugar, esta inferencia se basa en la cercanía que existe con el mar en donde el río Candelaria sirve como sistema de comunicación entre Petén y el Golfo de México. Además, en la existencia de diferentes sitios arqueológicos concheros que se encuentran diseminados en la desembocadura del río Candelaria con la Laguna de Términos, en donde los materiales que abundan son conchas de la subfamilia Gasterópoda del género Oliva. Este tipo de materiales descubiertos en las excavaciones en los contextos de entierro y en los rellenos de estructuras, fue utilizado para elaborar objetos ornamentales.
El intercambio de estos materiales con los sitios de la costa ocurrió principalmente por medio de las vías fluviales, ya que las características del río así lo permitieron. En el caso de la ruta fluvial, Pincemin (1989) la divide en tres partes: la parte sur o alto Candelaria, que va de su comienzo en Guatemala hasta Salto Grande; la parte central o medio Candelaria que va de Salto Grande a Ignacio Zaragoza; y por último la parte norte o el bajo Candelaria que va de Ignacio Zaragoza hasta donde el río desemboca en la Laguna de Términos, como observaron Gamboa y González en el recorrido que realizaron en 1999.
En las variaciones del cauce se puede observar que desde su origen en Guatemala (conocido como río San Pedro), la corriente es tranquila hasta la región de Salto Grande, en donde la pendiente del río Candelaria se vuelve un poco más prominente, creando saltos de agua de diferentes alturas y algunos rápidos, haciendo difícil el acceso y el cruce de las personas en esta parte. Más adelante, en la zona de la parte central, en el transcurso del camino de Salto Grande hacia Ignacio Zaragoza, predomina una vegetación de manglar, la cual hace que río sea más tranquilo y se estanque en algunos lados formando zonas pantanosas.
En la región del Candelaria, a la altura del sitio Salto Grande, se desprenden algunos ramales del río hacia varios lugares. Uno de los ramales se dirige hacia el noreste, conectándose con la laguna llamada Pozas de Ventura, la cual se encuentra rodeada en su mayor parte por áreas pantanosas y en menor proporción por áreas de tierra firme. Entre ellas se encuentra una pequeña península en la que se han localizado asentamientos prehispánicos, como el sitio del mismo nombre.
En el trayecto de Salto Grande a Pozas de Ventura se han detectado varios canales angostos, a los cuales se les han dado varias interpretaciones funcionales, aunque no se ha podido identificar bien cual fue su función, como observaron L. Gamboa y F González en el recorrido que realizaron en 1999.
Poco después de cruzar Ignacio Zaragoza termina la zona de manglares, continuando la tranquilidad del río. Esto se debe a que la pendiente del río tiene un promedio de 0.0005, lo cual muestra que sólo hay 10 m, entre lo más alto y lo más bajo. Su anchura y profundidad varía en todo su trayecto que va de sur a norte.
A lo largo del recorrido del río se han observado varias ramificaciones que se dirigen a diferentes regiones, que no se especificarán debido que no se encuentran bien registradas en los mapas y fuentes.
EL RÍO CANDELARIA
Es importante recordar que el río Candelaria comienza en Petén, Guatemala, atraviesa el estado de Campeche y desemboca en la Laguna de Términos. Debido a su longitud y posición estratégica este río constituyó una importante ruta fluvial para los grupos Chontales que se asentaron a lo largo de sus costas. Desde allí, los Chontales pudieron llegar por mar hasta la península de Yucatán y a Centroamérica, y por el norte hasta la Huasteca. Por la vía fluvial llegaron también a Chiapas y Petén (Vargas 1997:260).
El complejo sistema de asentamiento de los sitios prehispánicos que ocupan la cuenca del río Candelaria en el sur del estado de Campeche, mantuvo un desarrollo histórico concreto regional propio, desde el Preclásico hasta poco después de los procesos de conquista y colonización europea en el área. Así mismo, ha sido posible identificar un largo proceso de interacciones con otras áreas culturales de Mesoamérica, gracias a su estratégica posición fluvial con paso abierto por el río hasta la Laguna de Términos, lo que permitió desarrollar potencialmente un sistema de intercambio con otras regiones, que alcanzó su mayor desarrollo durante el Clásico Tardío. Xicalango, Potonchan, Tixchel e Itzamkanac, los grandes puertos de comercio e intercambio de los Chontales, se encontraban en sitios verdaderamente estratégicos para tal efecto, y su importancia es definitiva para entender el complejo sistema de interacciones entre diversas áreas incluso a nivel mesoamericano (Vargas 1997:269).
CONCLUSIONES
Las características geográficas de una región pueden ser un factor que influye de manera importante para que los grupos humanos que lo habitan puedan interactuar culturalmente con otros grupos, o bien para que permanezcan aislados. Los grupos Chontales de la cuenca del río Candelaria también se vieron influenciados por la geografía de su región y, al contar con una posición fluvial estratégica, se vieron condicionados a utilizar los ríos como vías de comunicación, ya sea navegándolos o siguiéndolos a lo largo de sus orillas, pues hay que recordar que en algunas áreas la vegetación dificulta el acceso por tierra. Así, aprovecharon un vasto sistema de rutas fluviales y lograron desarrollar sistemas de intercambio muy eficientes con otras regiones, como lo demuestran los objetos de concha, lítica y cerámica recuperados durante las excavaciones en el sitio Pozas de Ventura.
Desde tiempos remotos, el hombre ha utilizado todos los recursos que la naturaleza le ofrece. En el caso de las conchas y caracoles los usos que se le han dado son tan variados: 1) desde ser una fuente importante de alimentación; 2) dada su dureza y resistencia son un excelente material para la fabricación de instrumentos musicales, materiales de construcción, desgrasantes, joyería; 3) han sido objetos de tributo e intercambio. Pero quizá uno de los usos más importantes de los objetos de concha es el ritual, tanto para culturas que tienen acceso inmediato a este recurso como para los que sólo lo obtienen por medio de tributo o comercio. Sería muy difícil precisar el motivo por el cual la concha se convirtió en un símbolo para muchas culturas, incluidos los Mayas. Quizá se debe a que habitaban en medios acuáticos, a lo difícil que era obtener algunos ejemplares, por lo exótico y exclusivo que pudieron ser, o simplemente a la belleza intrínseca del material.
REFERENCIAS
Gamboa Cabezas, Luis M. y Raúl F. González Quezada
1999a Informe Técnico Final de la Temporada de Campo 1999-1: Registro, descripción y análisis de sitios arqueológicos y estructuras arquitectónicas internas. Informe técnico entregado al INAH, México.
1999b Informe Técnico Final de la Temporada de Campo 1999-2: Registro, descripción y análisis de la cerámica, lítica y concha. Informe técnico entregado al INAH, México.
2000a Proyecto de Investigación Arqueológica en Candelaria, Campeche: Sitios Pozas de Ventura y Salto Grande, Temporada de campo 1999-2. Informe técnico entregado al INAH, México.
2000b Proyecto de Investigación Arqueológica en Candelaria, Campeche: Sitios Pozas de Ventura y Salto Grande, Temporada de campo 1999-2. Parte II, Producción sistemática de información arqueológica: Análisis arqueológico del conjunto artefactual cerámico. Informe técnico entregado al INAH, México.
2000c Proyecto de Investigación Arqueológica en Candelaria, Campeche: Sitios Pozas de Ventura y Salto Grande, Temporada de campo 1999-2. Parte III, Producción sistemática de información arqueológica: Análisis arqueológico del conjunto artefactual de lítica tallada, pulida y concha. Informe técnico entregado al INAH, México.
Pincemin Deliberos, Sophia
1989 El Tigre y San Enrique, dos sitios del Valle del Candelaria, Campeche. Tesis Doctoral, Centro de Estudios Mayas, Vols. I y II, Universidad Nacional Autónoma de México, México.
Piña Chan, Román y Raúl Pavón Abreu
1959 ¿Fueron las ruinas de El Tigre, Itzamcanak?. El México Antiguo, Tomo I:473-491. México.
Suárez Diez, Lourdes
1977 Tipología de los objetos prehispánicos de concha. Colección Científica No 54, INAH, México.
1989 La concha en el contexto etnohistórico de cuatro fuentes escritas del siglo XVI. En Memorias de la XIX Mesa Redonda de la SMA, pp. 259- 270. Universidad Autónoma de Querétaro, Querétaro.
Thompson, J. Eric S.
1974 Canals of the Río Candelaria Basin, Campeche, Mexico. En Mesoamerican Archaeology: New Approaches (editado por N. Hanmmond), pp.297-302. University of Texas Press, Austin.
Vargas Pacheco, Ernesto (ed)
1995 Seis ensayos sobre antiguos patrones de asentamiento en el área Maya. Instituto de Investigaciones Antropológicas, Universidad Nacional Autónoma de México, México.
1997 El dominio de las rutas fluviales en la región Chontal. Acalan: El Lugar de las Canoas. En Las rutas de intercambio en Mesoamérica (coordinado por E. Rattray), pp. 259-276. Instituto de Investigaciones Antropológicas, UNAM, México.
Vargas, Ernesto y Lorenzo Ochoa
1982 Navegantes, viajeros y mercaderes: Notas para el estudio de la historia de las rutas fluviales y terrestres entre la costa de Tabasco, Campeche y tierra adentro. Estudios de Cultura Maya 14:59-119. Centro de Estudios Mayas, UNAM, México.