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Urquizú, Mónica y William Saturno
2007 Resultados de la quinta temporada de campo 2006 del Proyecto Arqueológico San Bartolo, Petén. En XX Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 2006 (editado por J. P. Laporte, B. Arroyo y H. Mejía), pp.$$. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala.
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RESULTADOS DE LA QUINTA TEMPORADA DE CAMPO 2006 DEL PROYECTO ARQUEOLÓGICO SAN BARTOLO, PETÉN
Mónica Urquizú
William Saturno
Palabras clave
Arqueología Maya, Guatemala, Petén, San Bartolo, excavaciones, ofrendas, restauración
Abstract
RESULTS OF THE FIFTH FIELD SEASON, 2006, OF THE SAN BARTOLO ARCHAEOLOGICAL PROJECT, PETEN
The fifth field season of the San Bartolo Archaeological Project has focused on the investigation of an architectural group named ‘Los Bigotes’ and has continued with work on the Las Pinturas Pyramid and the Tigrillo Palace. Here, results are presented on these architectural groups, as well as on the consolidation work in the tunnels that hold the San Bartolo murals.
El Proyecto Arqueológico Regional San Bartolo, ha dedicado cinco años al estudio del área noreste de Petén, específicamente San Bartolo y los asentamientos prehispánicos que lo rodean. Como ya es sabido, este sitio se caracteriza por su ocupación temprana y las manifestaciones religiosas, políticas y artísticas plasmadas en sus murales policromos, ubicados en la Pirámide Las Pinturas.
Las exploraciones en otros sitios tempranos como Uaxactun, Nakbe o Mirador, sumados con las investigaciones en San Bartolo, ayudan a comprender la complejidad de la sociedad para el Preclásico en las Tierras Bajas Mayas, y también conocer las bases del desarrollo de las tradiciones constructivas, arquitectónicas, artísticas y religiosas que se aprecian en el Clásico. Con este sentido de conocimiento, los trabajos arqueológicos en San Bartolo tienen básicamente por objetivo, el comprender y preservar los rasgos antropogénicos del sitio para el futuro.
En este quinto año de investigaciones, el trabajo se concentró en tres áreas específicas: el grupo arquitectónico Los Bigotes, el Palacio Tigrillo y la Pirámide Las Pinturas (Figura 1). En el primero de los casos Heather Hurst, Mónica Pellecer, Damaris Menéndez y Mónica Urquizú trabajaron en cinco estructuras del grupo. En esta oportunidad se inició la investigación de su arquitectura, así como la definición de su temporalidad.
En el Palacio Tigrillo, Astrid Runggaldier realizó la exploración de las estructuras más tempranas que contenía esta obra arquitectónica, y con ello culminar cuatro temporadas de investigación de este bello edificio. El otro objeto de estudio continuó en la Pirámide Las Pinturas, donde Edwin Román, Anabell Coronado, Rudy y Cristian Larios llevaron a cabo los trabajos de investigación, estabilización y conservación de la segunda y tercera fase constructiva, ya que hasta ese momento habían consistido primordialmente en la conservación de la pintura mural y en la reconstrucción de la parte inferior del muro norte, destruida por los saqueadores.
Boris Beltrán descubrió una serie de rasgos arquitectónicos que terminaron de definir la arquitectura de la Plataforma Ixbalamque y un nuevo edificio al oeste de la misma. Finalmente René Ozaeta y Heather Hurst se encargaron de las artes gráficas, mientras que Horacio Martínez hizo el registro fotográfico.
Figura 1 Mapa del Sitio Arqueológico San Bartolo con la localización de las áreas investigadas
INVESTIGACIONES EN EL GRUPO LOS BIGOTES
Los Bigotes se localizan aproximadamente a 400 m al sureste de la Pirámide Las Pinturas. El grupo tiene nueve estructuras (Estructuras 128-136) encima de una plataforma (Figura 2).
La plataforma misma, tiene un tamaño de 130 m por 170 m, y es una de las más grandes del sitio San Bartolo. En el lado este de la plataforma, está la estructura más grande del grupo (Estructura 133), que tiene una altura de 9 m al nivel de plaza. Atrás de dicho edificio, tres estructuras (128, 129,131) se alinean en eje norte-sur en el lado oeste de la plataforma.
Además hay dos estructuras grandes (132,136) que cierran la plaza en los lados norte y sur (Davies 2005:406). Finalmente, el grupo tiene dos estructuras juntas (130,134) en la plaza, que tienen la forma de un patio para Juego de Pelota (Griffin y Kwoka 2005:101).
Es interesante que la distribución de las estructuras recuerde al Grupo E de Uaxactun o al Complejo de Mundo Perdido de Tikal, como grupos de observación astronómica, aunque en el caso de Los Bigotes su distribución es inversa (Sharer 1998:185).
Figura 2 Mapa del Grupo Arquitectónico Los Bigotes
ESTRUCTURA 128
La Estructura 128 se ubica al oeste del Grupo Los Bigotes, sobre el eje este-oeste y en el extremo opuesto a la Estructura 133. Se trata de una estructura pequeña de forma rectangular que funcionó como acceso al grupo desde el sector este, en donde se comunica directamente con una de las terrazas de adaptación natural a la colina caliza, que sostuvo en su parte superior a todo el conjunto arquitectónico.
Las investigaciones realizadas en la misma, conllevaron la excavación de trincheras horizontales paralelas a los muros, ubicación de las escalinatas y esquinas, tanto en su base como en el nivel superior, en donde se realizó un pozo con fines cronológicos que culminó sobre la roca caliza natural.
Con lo anterior se logró definir la forma arquitectónica de la estructura, bastante destruida por la mala calidad de su material constructivo y por la posible desmantelación de sus elementos. Se trata de una estructura alargada de un solo cuerpo con muros altos, evidentes por un colapso en la esquina noroeste que determinó una altura alrededor de los 2 m; las esquinas poseen doble remetimiento que hace destacar los muros norte y sur, observándose que sus paredes fueron ataludadas con una pequeña cornisa en su parte superior. Estos muestran restos de estuco con evidencia de pintura roja sobre la esquina noroeste.
La estructura presentó dos escalinatas de acceso a su parte superior, una al este y otra al oeste. La escalinata este fue la más conservada y presentó 5 m de ancho, con escalones de 0.50 m de huella x 0.25 m de contrahuella.
En la parte superior, sobre el piso de la plataforma, se ve que en la área central frente a la escalinata, se delimitó un espacio flanqueado por alineaciones de piedra al norte y sur, mismo que daba acceso al cuarto superior, en cuyo frente presentó una pequeña banqueta. El cuarto fue de 10 m de largo x 2.50 m de ancho interior y tuvo en la parte central una puerta de acceso de 2.50 m de ancho; no fue posible ubicar las esquinas y el muro oeste, sin embargo si se encontró la huella de donde estuvo ubicado y fue cortado.
El pozo develó por lo menos cuatro etapas constructivas basadas en los niveles de piso, todas fechadas preliminarmente para el Preclásico Tardío.
ESTRUCTURAS 130 Y 134
Ambas forman parte del patio para Juego de Pelota ubicado al suroeste de la Estructura 133. Se realizó una trinchera horizontal sobre las mismas para definir su apariencia arquitectónica, sin embargo no se logró determinar mayores rasgos debido a su destrucción. De las mismas solo se pudo determinar que el corredor o cancha tiene 3 m de largo y que ambas poseen rasgos arquitectónicos similares, como la pared frontal que presenta un talud de aproximadamente 1 m de alto, sobre el cual fue evidente un descanso y posiblemente otro muro en talud sobre el mismo. Se recolectó muy poco material cerámico de la excavación, aunque al parecer corresponde también al Preclásico Tardío. Se realizó la limpieza de un posible chultun al suroeste del patio para Juego de Pelota, sin embargo al limpiarlo se descubrió que se trata de un agujero natural, posiblemente una cueva pequeña, cuyo techo calizo colapsó a manera de lajas.
ESTRUCTURA 132
El objetivo principal de las excavaciones en la Estructura 132 era determinar la forma y la fecha de esta estructura monumental que se localiza en el extremo norte de la plataforma principal. En las excavaciones se investigaron las últimas dos épocas en la secuencia de ocupación: la penúltima fase de construcción fina, y la última fase de remodelación y reutilización de la estructura. Esta estructura como las otras del grupo, se construyó directamente sobre la roca madre, un afloramiento natural en la parte este del sitio San Bartolo.
La excavación de dos trincheras perpendiculares se enfocaron en el lado sur de la estructura, revelando que dicha estructura tiene una fase de arquitectura fina con taludes muy ornamentados, que fueron organizados en una fachada que contiene muros y esquinas remetidas y sobresalientes, con probabilidad de la existencia de una escalinata remetida subiendo los 5 m de altura de la plataforma. Esta fase se caracterizó por bloques grandes y finos. En una época más tardía, la fachada fue rediseñada con piedras rústicas y piedras robadas de la fachada anterior, y usaron un relleno de tierra como núcleo constructivo. Con esta remodelación las actividades incluyeron una ofrenda ubicada en una esquina remetida de la fachada sur.
El análisis preliminar indica que la fecha de la penúltima fase de la Estructura 132 fue el Preclásico Tardío. Encima de la plataforma de este edificio está la superestructura 132A. Se encontró el muro norte del edificio rectangular y el piso de la plaza, también se recuperaron tiestos del relleno de la plataforma y la superestructura para entender la secuencia de construcción.
ESTRUCTURA 133
Esta es una de las edificaciones más grandes del grupo. Se sitúa al extremo este del grupo. Consiste en una plataforma basal sobre la cual se sustenta una superestructura formada por un cuarto, cuyo acceso está hacia el oeste y que posee un patio interior, viendo hacia el lado este. En el área del patio interior se detectaron alineamientos de piedra sin cortar que podrían haber funcionado como plataformas, aunque de apariencia rústica. Además, se realizó un pozo de sondeo con propósito cronológico en donde se recolectó abundante material cerámico fechado para el Preclásico Tardío.
Al igual que la Estructura 132 se han detectado por ahora dos etapas constructivas: la primera de mejor calidad con piedra bien cortada y estuco pulido, mientras que la última etapa es muy rústica, elaborada con tierra. Es importante resaltar que este edificio aparentemente también fue desmantelado, ya que los muros únicamente muestran una hilada de piedra y no existe presencia de material constructivo en ella. Pudo observarse que al igual que el Grupo Jabalí, parte del relleno de esta estructura está compuesto por arcilla de los bajos, en niveles profundos de su relleno constructivo.
En las excavaciones para definir la arquitectura de la superestructura, se detectó el piso del cuarto –que se encontró roto– y al sureste de esta anomalía se observó la presencia de una formación circular elaborada con piedras lajas, y sellada con otra piedra a forma de tapadera. Dentro de este depósito se encontró un escondite (Ofrendas 12 y 13), consistente en un cántaro tipo Sierra Rojo y un cuenco tipo San Antonio Café Dorado como tapadera. Dentro de dicho cántaro se localizó una cuenta de jade y dos fragmentos óseos de animal (Figura 3). Siguiendo la excavación se sitúo 1.20 m más abajo, otro alineamiento de lajas sobre el cual se depositó un plato tipo Sierra Rojo. Todo este conjunto forma un pequeño recinto intrusivo al relleno de la estructura y marca una ofrenda al eje del edificio. Los materiales arquitectónicos recuperados muestran una cronología para el Preclásico Tardío. Esta estructura parece apuntar hacia una función ritual, pero aún hacen falta más investigaciones para determinar dicho aspecto, así como se necesita definir de manera más completa sus formas arquitectónicas y su desarrollo constructivo.
Además, se muestran algunas figuras relacionadas con la excavación de estas estructuras (Figuras 4 a 7).
Figura 3 Perfil este-oeste con localización de Ofrendas 12 y 13 en la Estructura 133 de Los Bigotes
Figura 4 Ejemplo de excavación en el grupo
Figura 5 Ejemplo de excavación en el grupo
Figura 6 Ejemplo de excavación en el grupo
Figura 7 Reconstrucción hipotética del grupo (dibujo de Heather Hurst)
TRABAJOS EN EL PALACIO TIGRILLO
En el área del Palacio Tigrillo únicamente se llevaron a cabo excavaciones en la fachada y escalinata monumental (Figuras 8 y 9). Las investigaciones de esta última temporada se enfocaron en la recuperación de información cronológica del desarrollo del conjunto palaciego por medio de túneles a través de sus etapas constructivas.
De los túneles, uno se había empezado el año pasado, proporcionando evidencia de varias etapas de remodelación en la superficie de la escalinata.
Entre la muestra cerámica analizada subsiguientemente se identificaron algunos tiestos del Clásico Tardío en porcentajes mínimos, pero cuya presencia sugiere que el Palacio no solamente se ocupó por este periodo, si no que también se hicieron trabajos constructivos.
Las excavaciones de esta temporada tuvieron por objeto el identificar con mayor precisión las etapas de remodelación del Clásico Tardío y distinguirlas de las etapas constructivas de periodos anteriores que forman parte del diseño original de la Plaza Principal.
Se excavaron tres grupos de túneles desde los pisos de la plaza en dirección oeste, uno en el eje central este-oeste, uno en la mitad norte de la fachada y uno en la mitad sur. Con esto, se logró determinar que la plataforma principal del Palacio está fechada para el Preclásico Tardío y que mide aproximadamente 35 m de largo en eje norte-sur.
Además se verificó que esta área fue abandonada por varios siglos, visibles por el deterioro de la escalinata enterrada, y también por la confirmación de Rudy Larios, basándose en la evidencia de las grietas y hoyos de las superficies estucadas, de las paredes de la plataforma.
Para la reocupación del Palacio en el Clásico Tardío, se necesitó de remodelaciones en todas sus superficies, que se identificaron por lo menos en tres etapas constructivas.
Significativamente estas remodelaciones presentan una calidad inferior de mampostería a la original del Preclásico; los estucos aparecen muy delgados y los materiales reciclados de los rellenos, explican la falta en gran escala de material cerámico del Clásico Tardío, tal como la presencia de tiestos preclásicos de estructuras desmanteladas y depósitos reutilizados.
Aunque la mampostería presenta escasa calidad constructiva, las formas arquitectónicas parecen ser repetitivas a las del Palacio del Preclásico y sugieren que los habitantes que reocuparon el sitio, quisieron emular la monumentalidad de sus edificios anteriores a pesar de que sus recursos eran menores.
Esto significa que las ocupaciones del Preclásico y Clásico Tardío, separadas por una larga fase de abandono fueron muy diferentes, aunque se aprovecharan los mismos lugares. Además, los cambios en la historia política del sitio determinaron diferencias constructivas en su patrón de asentamiento, visibles solamente a través de excavaciones.
Figura 8 Perfil este-oeste del Palacio Tigrillo con la localización de las nuevas excavaciones
Figura 9 Túneles relacionados con el grupo
EXCAVACIONES EN PINTURAS SUB-6 (IXBALAMQUE)
En esta temporada de campo se dio continuidad a las excavaciones que iniciaron el año anterior, enfocadas en las primeras etapas constructivas de la Pirámide Las Pinturas.
Los datos recolectados en tal ocasión se limitaron a la definición parcial de las Estructuras Ixquik, Ixmucane e Ixbalamque (Pinturas Sub-8, 7 y 6 respectivamente) debido al reducido espacio entre cada estadio constructivo, la liberación de las primeras dos etapas constructivas fue parcial y sin la oportunidad de definirlas completamente, sin embargo, este no es el caso de la tercera etapa constructiva (Ixbalamque), ya que con la temporada de campo 2006 se concluyó la investigación de la misma.
Fue necesaria la excavación de cuatro túneles, en áreas precisas donde se obtendrían la mayor cantidad de datos, logrando de esta manera la definición completa de la misma (Figura 10 a 12).
Ixbalamque es una plataforma de 26 m norte-sur y 12 m este-oeste, en cuya parte superior sustenta un pequeño edificio, presenta tres escalinatas remetidas frontales, con siete escalones que dan acceso a la parte superior de la plataforma, luego de un leve descanso de 1.50 m, muestra tres pequeños cuerpos decorados en los cuatro lados, dos de los cuales son de 0.50 m de alto y el otro de 1 m, que da a la plataforma la altura de 2 m; cada uno de los cuerpos tiene paredes en talud con molduras que se remeten en pequeñas paredes, que descansan el primero sobre el piso de plaza y los otros sobre el piso de cada cuerpo.
La escalinata central da acceso a un descanso de 1.50 m sobre el eje este-oeste de la estructura, localizándose también otros dos escalones que dan acceso a un descanso de 2 m sobre el primer cuerpo de la estructura, seguido de un basamento complementario de 0.30 m de alto que posiblemente sustentó un cuarto con paredes estucadas de finos acabados.
Presenta dos escalinatas remetidas posteriores con ocho escalones que dan acceso a la parte superior de la plataforma; el descanso de 3.60 m en eje este-oeste alinea dichas escalinatas con las presentes en el lado frontal de la estructura, además de forma similar al frente de la estructura, posee tres pequeños cuerpos decorados.
El Preclásico se caracteriza por detalles como molduras, esquinas redondeadas, taludes y como en el caso de Ixbalamque, esquinas remetidas que rematan en un faldón central en forma de talud, hasta el templo que sustenta la plataforma (Valdés 1989:56). Al norte y sur de la estructura se observó un talud con una inclinación de 40º, iniciando en una banqueta de 0.50 m de huella y 0.35 m de contrahuella, llegando hasta el descanso en la parte superior de la plataforma.
Además, con las excavaciones al oeste de Ixbalamque, se determinó la presencia de una segunda estructura perteneciente al mismo estadio constructivo que se localiza a 18 m al oeste de Ixbalamque y orientada en eje norte sur.
Por el momento solo se logró definir el lado este de dicha estructura: se trata de una pequeña construcción de 5 m de ancho y 1.75 m de alto, con una sutil inclinación que da el aspecto de talud desde la parte superior hasta el piso de plaza, se observan esquinas redondeadas que rematan en una pequeña banqueta de 0.50 m de huella y 0.50 m de contra huella.
Es necesario dar continuidad a esta investigación, para definir completamente la pequeña estructura, puesto que aun son desconocidos los lados norte y oeste, de esta manera se podrá concluir la investigación de la tercera etapa constructiva.
Figura 10 Planta de Plataforma Ixbalamque
Figura 11 Corte de la estructura
Figura 12 Túnel en la estructura
RESTAURACIÓN Y ESTABILIZACIÓN DE LOS TÚNELES DE PINTURAS SUB-1
Para proseguir con las primeras labores de investigación y conservación (Larios 2005:561), se comenzó con la definición y consolidación de los túneles de acceso hacia el interior de la Cámara de los Murales. Para ello, se constituyó formalmente un grupo de trabajadores que participaron exclusivamente en los trabajos técnicos de estabilización de la arquitectura de Pinturas.
Se generaron distintas estaciones de trabajo dividiendo las labores que incluyeron: excavar y consolidar los túneles, localizar y trabajar varias canteras de piedra y una de tierra caliza, para la disposición de los materiales requeridos en la elaboración de mezcla y el afianzamiento de las paredes en los túneles.
Paralelamente a estas labores se hicieron trabajos enfocados en la liberación de ciertos rasgos arquitectónicos que ayudarían a la comprensión del Cuarto sub 1A y la recolección de los diferentes materiales arqueológicos como cerámica y estuco. En total se efectuaron seis unidades al interior de la estructura y seis al exterior, que tuvieron materiales fechados para el Preclásico Medio y Tardío.
Las excavaciones al exterior de la Estructura 1, se centraron principalmente en la remoción del escombro y limpieza de los perfiles norte y sur de la trinchera de saqueo principal. En estos trabajos se descubrió un nuevo estadio constructivo, el cual seria la última etapa de Pinturas.
Retornando a la conservación, la mayor parte de la consolidación se hizo en el exterior de la Cámara de los Murales y esto puede resumirse en dos tareas generales: la excavación y la consolidación del relleno de la segunda estructura para ubicar los nuevos túneles de entrada a Sub 1A.
Las paredes del túnel que da acceso desde la trinchera de saqueo y que atraviesa la primera y segunda fase constructiva en dirección este-oeste, se reforzaron con piedra, con la aplicación de nueva mezcla y se cubrieron con una bóveda en saledizo.
En el talud posterior del primer cuerpo de la segunda fase constructiva, se restituyó hasta el nivel de piso superior todo el volumen de relleno perdido durante las excavaciones ilegales. La intención fue reducir la gran altura que tiene la trinchera de saqueo en el lado este de Pinturas, para proveer seguridad y una mayor estabilidad en las paredes del corte, además de restaurarle estética y estructuralmente la armonía en los elementos arquitectónicos destruidos.
Los trabajos en el interior de Sub 1A fueron mínimos, restringidos a la reintegración de mampostería en la parte central norte inferior del muro oeste, donde todavía podía apreciarse el talud de la plataforma Yaxche. Para proteger del paso de personal a los restos de arquitectura en la cara este de Sub 1A, el túnel que inicialmente se hizo durante las investigaciones de la fachada principal fue rellenado, y se excavó uno en paralelo a 1.50 m hacia el este del anterior.
El nuevo túnel, también en dirección norte-sur, quedó delimitado en un lado por el túnel de acceso principal y en el otro, por el perimetral en la fachada sur de Sub 1A. Se construyó una ventana con la forma de túnel sobre el extremo norte de la grada central de acceso a la Cámara de los Murales en la fachada este, haciendo una réplica a menor escala de los trabajos de consolidación en el resto de los otros túneles.
Para reforzar las paredes de los túneles, se utilizó una mezcla de cal y tierra en proporción 3:1 sustituyendo las piedras del relleno donde fue necesario. Para el cielo de los túneles se empleó el principio del arco falso de los mismos Mayas, colocando piedras lajas salientes hasta cubrir a nivel del caballete con una bóveda. La dimensión de los túneles fue de 1 m de ancho x 2 m de altura, y se consolidaron las paredes hasta los 1.60 m, para en ellos, apoyar la construcción de las bóvedas.
Se labraron las piedras para los cierres de bóveda, especialmente las que iban colocadas en la convergencia de túneles, siendo estas las piezas claves para la distribución de los empujes horizontales y verticales.
Se consolidaron alrededor de 30 m3 en muros y 13 m3 en la construcción de bóvedas. Finalmente se iniciaron los preparativos para continuar la próxima temporada, con la consolidación de los túneles perimetrales y sobre todo, la planeación del trabajo más delicado en el interior de la Cámara de los Murales.
CONCLUSIONES
Al finalizar esta temporada de campo se ha podido obtener valiosa información sobre la arquitectura de San Bartolo y su desarrollo constructivo que muestra cambios constantes y drásticos, tal es el caso de las remodelaciones, desmantelamiento y reocupación de las estructuras investigadas.
Pudo constatarse que entre los factores que influyeron a dichos cambios, se encuentra la escasez de materia prima y en algunos casos la mala calidad de la piedra utilizada. Por otra parte, cambios sociales pueden percibirse a través de los desmantelamientos, al posiblemente abandonar estos, como se observa en el Grupo Los Bigotes y a la reocupación de otros, como sucedió con el Palacio Tigrillo.
Otro aspecto interesante es la distribución de las estructuras en el Grupo Los Bigotes que apunta hacia una función ritual o astronómica, aunado a su cercanía con la Pirámide Las Pinturas, sin embargo se necesita más investigación para poder definir certeramente esta situación, así como comprender el porqué de sus cambios constructivos y su “posible abandono” o cambio en su utilidad.
En la Pirámide Las Pinturas, se definió de forma satisfactoria la plataforma Ixbalamque, así como pudo observarse más actividad constructiva con el edificio nuevo, al oeste de la plataforma. Por otra parte los trabajos de investigación, conservación y estabilización de los túneles de Pinturas Sub-1, ha llenado las expectativas esperadas y se pretende concluir con los trabajos el próximo año.
Es importante mencionar que a pesar de la corta temporada, esta fue muy satisfactoria y por demás bien aprovechada para tener un cálculo certero y un avance significativo de las tareas de conservación que restan en los años venideros, paralelamente a la investigación que va de la mano con esta tarea. Así, se continuará con el compromiso y la responsabilidad de garantizar la salvaguarda de las pinturas murales de San Bartolo y su contexto, con el uso de las técnicas más convenientes y el trabajo multidisciplinario de expertos en las áreas de la conservación, la arquitectura y la arqueología.
REFERENCIAS
Davies, Diane
2005 SB 20: Excavaciones en el Grupo Los Bigotes. En Proyecto Arqueológico San Bartolo, Informe Preliminar No.4. Cuarta Temporada 2005 (editado por M. Urquizú y W. Saturno), pp.406-413. Guatemala.
Griffin, Robert E. y Joshua J. Kwoka
2005 SB 3A: Reconocimiento dentro de la Delimitación de San Bartolo. En Proyecto Arqueológico San Bartolo, Informe Preliminar No.4. Cuarta Temporada 2005 (editado por M. Urquizú y W. Saturno), pp.100-109. Guatemala.
Larios Villalta, Carlos Rudy
2005 Conservación de Murales y Estabilización de Túneles en la Pirámide Las Ventanas. En Proyecto Arqueológico San Bartolo, Informe Preliminar No. 4. Cuarta Temporada 2005 (editado por M. Urquizú y W. Saturno), pp.560-565. Guatemala.
Sharer, Robert J.
1998 Los Mayas Preclásicos. En La Civilización Maya, pp 83-144. Fondo de Cultura Económica.
Valdés, Juan Antonio
1989 Visión evolutiva de Uaxactun a la luz de nuevas investigaciones. Revista Estudios, mayo, pp.53-82. Instituto de Investigaciones Arqueológicas, Antropológicas e Históricas, Escuela de Historia, Universidad de San Carlos, Guatemala.