Descargar este artículo en formato pdf
¿La capital y su puerto capital? Reconsiderando las interacciones del Clásico Terminal entre Chichén Itzá e Isla Cerritos
Introducción
En las últimas décadas, las temáticas como el comercio y el intercambio han dominado el discurso de las interacciones económicas en la Arqueología. El comercio se interpreta comúnmente mediante los enfoques positivistas que tratan de identificar fehacientemente la procedencia de los materiales como la obsidiana o la cerámica (Bishop 2014). Las discusiones acerca del intercambio han aterrizado más al contexto arqueológico y con una firme preferencia hacia el diseño de modelos que identifican el tipo de intercambio, principalmente el intercambio de mercado (Feinman y Garraty 2010; Garraty 2009; Hirth 1998; Stark y Garraty 2010:34).
Sea cual sea el modelo o enfoque que apliquemos a los datos arqueológicos, la tendencia contemporánea de las interacciones parece inclinarse hacia un lado del péndulo cuyo carácter es únicamente comercial, de intercambio de mercado y de control sobre los recursos o las rutas (ver Braswell 2010; Cobos 2013; Demarest et al. 2014; Feinman y Garraty 2010; Feinman y Nicholas 2010; Hirth 1998; Masson y Freidel 2012; Minc 2009). No obstante, hay que explorar el otro lado del péndulo y comprender que las interacciones son más que un simple movimiento de mercancías y nomenclatura de procesos económicos. ¿Cuál fue la dinámica social de las interacciones entre los antiguos Mayas?
Chichén Itzá fue, sin lugar a dudas, una de las ciudades más importantes en las Tierras Bajas del Norte durante el Clásico Terminal (900-1,100 DC). Además de la impresionante arquitectura monumental, el hallazgo de objetos alóctonos solamente demuestra los lazos económicos y políticos que tuvo Chichén Itzá durante su apogeo (García Moll y Cobos 2009).
Las investigaciones realizadas tanto en la costa del Golfo de México y en el Mar Caribe como en los sitios regionales, han posibilitado interpretaciones económicas que involucran a Chichén Itzá. Donde algunos asumen la presencia de un sistema de mercado abierto y competitivo a partir del Clásico Terminal en las Tierras Bajas del Norte (Braswell y Glascock 2003:41, Braswell 2009:19), otros favorecen un sistema de mercado administrado y orquestado por la élite de Chichén Itzá (Cobos et al. 2014:60; Cobos 2015b en prensa).
Otro tema en torno a las interacciones económicas ha sido la discusión sobre el papel hegemónico de esta capital regional. Para importar la cantidad de productos de varias regiones de Mesoamérica, se ha afirmado que Chichén Itzá estableció el monopolio sobre la producción salinera en el norte de Yucatán, al igual que de las rutas marítimas y del trasiego de mercancías (Andrews et al. 1989; Braswell 1997; Cobos 2010; Gallareta et al. 1989). En palabras de la teoría del sistema mundial, Chichén Itzá se convirtió en el núcleo cuyas periferias fueron sus puertos y algunos sitios del tercer rango alrededor de esta ciudad capital (Cobos 2001:271; Kepecs et al. 1994; Kepecs 2007).
Ciertamente, los análisis de procedencia de los materiales y su presencia en los sitios arqueológicos han permitido dilucidar una parte de las interacciones dentro y entre las sociedades prehispánicas. Es por este hecho que se conoce que entre Chichén Itzá e Isla Cerritos había interacciones económicas. En el presente trabajo se utilizarán los datos para realizar una revisión de otras posibles interacciones, especialmente, interacciones de carácter social y político (Agbe-Davies y Bauer 2011:13). Asimismo, se tratará de catalizar la discusión teórico-metodológica sobre el papel de la comunalidad para los Mayas prehispánicos.
Chichén Itzá e Isla Cerritos: Antecedentes de las interacciones
Chichén Itzá se representa a menudo como una ciudad de capital importancia en el transcurso del Clásico Terminal en las Tierras Bajas del Norte. Las publicaciones académicas han escrito sobre su extensa red de calzadas (Cobos y Winemiller 2001), organización política y militar (Baudez y Latsanopoulos 2010; Cobos 2007; Ringle 2004), relación con Tula (Kristan-Graham y Kowalski 2007), rasgos arquitectónicos (Fernández Souza 1999), cronología (Cobos 2001, 2004, 2015b en prensa; Peréz de Heredia Puente 2012), colapso (Andrews 1990) y, últimamente, sobre condiciones climáticas (Cobos et al. 2014). Sin embargo, la discusión más exuberante ha sido en torno de las interacciones.
Gracias a los avances en los análisis químicos de procedencia, se ha logrado evidenciar que Chichén Itzá importaba objetos de Panamá, Costa Rica, Guatemala, centro y norte de México (Andrews 1998:22; Cobos 1998). Posteriormente, el auge de las investigaciones regionales de Yucatán posibilitó la búsqueda de patrones sobre las interacciones económicas efectuadas por Chichén Itzá. Braswell (2009:19, 2010:137), por ejemplo, utilizó el incremento de la obsidiana centro-mexicana en sitios de la región Puuc como argumento de una “economía de mercado abierta, altamente comercializada e interregional a partir del siglo X”. En contraparte, Cobos et al. (2014:60) emplearon datos cerámicos, epigráficos y de obsidiana para razonar que Uxmal y sus sitios dominados participaron en una “economía de mercado administrada en conjunto con Chichén Itzá durante los siglos X y XI”.
Para los simpatizantes de la economía de mercado administrada, Chichén Itzá se aseguró la llegada de mercancías mediante la hegemonía sobre los puertos marítimos. La presencia de la cerámica del complejo Sotuta de la fase tardía (Tohil plomizo, Naranja fino, Chichen Rojo y Chichen Pizarra), la obsidiana y los rasgos arquitectónicos particulares de las islas como Uaymil, Xcopté, Isla Cerritos, El Meco, San Gervasio, Xcaret, Chac Mool, San Juan, Marco Gonzalez y Chac Balam, sirvieron para determinar que Chichén Itzá ejerció el control político y económico sobre éstas durante el Clásico Terminal (Cobos 2010, 2015a).
Desde las primeras excavaciones durante los años 1984 y 1985 en Isla Cerritos (sitio ubicado a escasos 90 km al norte de Chichén Itzá), la presencia del complejo cerámico Sotuta de la fase tardía (900-1,100 DC), el jade, la turquesa, el basalto, el oro y las fuentes de obsidiana porcentualmente similares a las de Chichén Itzá, han corroborado las hipótesis de las interacciones entre ambos sitios (Andrews et al. 1989:361; Gallareta et al. 1989:319) (Figs.1 y 2). Mas la presencia de objetos similares en ambos sitios, sirvió para interpretar el aparente sometimiento de este puerto bajo el dominio de Chichén Itzá. Desde este momento, Isla Cerritos empezó a ser vista como un enclave comercial de Chichén Itzá a través de la cual esta capital se apoderó tanto de la producción de sal en la costa norte de Yucatán, como de la importación de productos de regiones distantes (Andrews et al. 1989; Cobos 2010:336; Gallareta et al. 1989).
Posteriormente, la teoría del sistema mundial apoyó esta visión hegemónica y se definió el núcleo regional (Chichén Itzá) cuya tarea fue, primordialmente, la de dominación y explotación de sus periferias (Isla Cerritos, entre otras islas), todo aquello para satisfacer las necesidades de la élite de esta ciudad capital (Cobos 2015b en prensa; Kepecs et al. 1994; Kepecs 2007).
Al observar a detalle tanto la postura de la economía de mercado administrada como la teoría del sistema mundial, se puede notar que ambas se enfocan en demostrar la supremacía económico-política de Chichén Itzá, basándose principalmente en mercancías “exóticas” (ver Stanton y Gallareta 2001:238). Al igual que en Chichén Itzá, en el Mar Egeo la insularidad se ha vinculado con el imperio de Atenas (Constantakopoulou 2007:84). Sin embargo, en este caso, se han alcanzado a yuxtaponer las interacciones económicas con aquellas de carácter social y político. Por ejemplo, las interacciones entre las islas y Atenas denotaban relaciones de alianza y no necesariamente de explotación, monopolio o subyugación por un núcleo dominante (Constantakopoulou 2007:62). También, la presencia de la cerámica particular de Atenas en las Islas Egeas indicaba más bien un sentido de pertenencia o identidad compartida, que una subordinación como en el caso de la cerámica Sotuta de la fase tardía, comúnmente relacionada con la esfera político-económica dominada por Chichén Itzá (Cobos 2015a:5; Constantakopoulou 2007:72).
Contrariamente a las visiones que se tienen sobre las islas de los Mayas como sinónimos de lugares de intercambio y comercio, en el Mar Egeo “la diversidad fue la norma” (Constantakopoulou 2007:260). Se han discutido distintos roles de las islas en este territorio; islas formando micro-imperialismo entre sí, islas como lugares a salvo de la opresión de imperio, islas como lugares de exilio o prisión, islas como lugares vulnerables ya que implican una amenaza para tierra dentro, islas como bases para atacar, islas como lugares de colonización, y sin lugar a dudas islas como puentes estratégicos para transportar mercancías (Constantakopoulou 2007:8, 88, 118, 119, 120, 134, 178). Braudel (1995:98) menciona que los habitantes de las islas y las costas del Mar Mediterráneo estaban estratégicamente ubicados para imitar las “cerámicas azules o los vidrios polícromos de Egipto”. Patton (1996:27) añade que en una sociedad marítima, el acceso a barcos, socios comerciales y habilidades de navegación se pueden potencialmente monopolizar (no exclusivamente por un centro de poder de tierra adentro).
Por otro lado, el paradigma del sistema mundial se ha ido abriendo a nuevas posibilidades desde que Wallerstein (1976) presentó sus planteamientos en la década de 1970. En la actualidad se ha estado formando la discusión que rebasa la idea de la explotación como única forma de interacción entre el núcleo y la periferia (Kardulias 2008:62). Hall et al. (2011:243) y Kardulias (2008:61) argumentan que las periferias pueden operar también como “zonas de innovación o de conflicto”. Las periferias de igual manera pudieron haber condicionado la presencia de foráneos del núcleo en su territorio y las condiciones de su involucramiento en el comercio u otras formas de interacción social (Kardulias 2008:75). De hecho, para Kardulias (2008:76), el Estado raramente podía haber impuesto sus reglas sobre la periferia a largo plazo.
Los casos anteriores ampliaron el espectro interpretativo y demostraron que las interacciones entre las islas y con tierra adentro operan de manera multifacética tanto diacrónica como sincrónicamente. Más allá de quién dominaba y explotaba a quién, se ha notado que los aparentemente débiles también tienen formas de negociar las condiciones con los centros de poder. A continuación se presentarán alternativas preliminares para explicar las interacciones entre Chichén Itzá e Isla Cerritos.
Chichén Itzá e Isla Cerritos: Otras vías interpretativas de la interacción
La Arqueología depende de los vestigios materiales. Sea la obsidiana, la cerámica, la pirámide, la estela, los huesos humanos o de animales, a final de cuentas se interpreta a través de las observaciones del contexto arqueológico. Mientras que la procedencia de obsidiana es posible trazar con métodos científicos, la interpretación comúnmente depende del paradigma en uso (Bauer y Agbe-Davies 2011:40).
En Chichén Itzá e Isla Cerritos, como se ha visto, ha dominado el paradigma o perspectiva interpretativa de las interacciones cuya base fue la hegemonía, evidenciada por la procedencia de los materiales y su presencia/ausencia en el contexto arqueológico. Sobre el empleo del paradigma o perspectiva, Hall et al. (2011:239) afirman dos puntos clave:
1) “Las teorías pueden demostrarse como no válidas, mientras que las escuelas de pensamiento, paradigmas o perspectivas no pueden.
2) Cuando el paradigma deja de producir más preguntas, está fuera de uso.”
Por ende, la indagación y reflexión sobre los puntos anteriores trae consigo las siguientes preguntas:
1.) ¿Se crean teorías nuevas?
2.) ¿Se consideran preguntas nuevas sobre las interacciones de los Mayas prehispánicos?
3.) ¿Llevan los datos nuevos a interpretaciones divergentes?
4.) O más bien, ¿se adscriben los datos automáticamente a las interpretaciones dominantes en el paradigma o perspectiva preferente? (ver Bauer y Agbe-Davies 2011:40).
Ante los datos arqueológicos que han emergido de las investigaciones realizadas en Chichén Itzá e Isla Cerritos, han surgido más interpretaciones de las interacciones entre ambos sitios durante el Clásico Terminal. Dentro de la economía de mercado administrada, Cobos (2015b en prensa) recientemente sugirió que la autoridad de los grupos arquitectónicos en Chichén Itzá, formados por templo, altar y patio-galería (comúnmente asociados a la cerámica Naranja Fino, Tohil Plomizo y la obsidiana del centro de México y Guatemala) se encargó posiblemente de distribuir internamente las mercancías foráneas. Como segunda alternativa, se ha aludido que los jefes de estos grupos “financiaron tanto a sus propios mercaderes como aquellos que fueron independientes en las tareas de intercambio y transportación de bienes y mercaderías por toda el área maya y Mesoamérica con el fin último de que llegaran hasta Chichén Itzá”. Como tercera alternativa se ha propuesto la combinación de las primeras dos (Cobos 2015b en prensa).
Sin embargo, ¿existen otras alternativas que explicarían las interacciones entre Chichén Itzá e Isla Cerritos? Si las mercancías tuvieron el fin de llegar hasta Chichén Itzá, ¿cómo se interpreta el hallazgo de Naranja Fino, Tohil Plomizo, obsidiana, turquesa, basalto y piedra verde en Isla Cerritos? (Andrews et al. 1989; Cobos 2010). Si los habitantes de Isla Cerritos fueron subordinados a Chichén Itzá, ¿cómo explicar el entierro de cuatro individuos en una unidad doméstica (Estructura 8) en esta isla, asociado con manos y metates de basalto, collares de piedra verde, una cuenta de turquesa, obsidiana verde, cerámicas Naranja Fino y Tohil Plomizo, y un pendiente de oro? (Cobos et al. 2007:42) ¿Cómo interpretar el aumento de la construcción a partir del Clásico Terminal? (Cobos 2010:336; Gallareta et al. 1989:316). Si Chichén Itzá dominaba a Isla Cerritos ¿a qué correspondería la ausencia de las estructuras tipo patio-galería (residencias de individuos de alto status) en Isla Cerritos? (ver Cobos 2010: 336).
La comunalidad
La vía alternativa que aún espera a desarrollarse en la Arqueología es la comunalidad, o mejor dicho, modo de vida de carácter colectivista en las comunidades indígenas (Rendón Monzón 2003:11). Esta forma de organizarse e interactuar tiene sus orígenes prehispánicos en diversas culturas de Mesoamérica y América Latina, que a pesar de algunas modificaciones, aún sigue practicándose. Inclusive, -y lejos de presentar algo novedoso-, es factible argumentar que se trata de un rasgo cultural de longue durée (ver Fuente Carrasco 2012:9; Martínez Luna 2003:47; Medina 2011; Mendoza-Zuany 2014; Rendón Monzón 2003:29). En Bolivia se habla de “sumaq qamaña” o “vivir bien”, en Ecuador es “sumaq kawsay” o “buen vivir” (Medina 2011; Solano y Lazarini 2009:147). La Lone (1982:293), en su análisis de fuentes etnohistóricas se percató que el fundamento de las interacciones residió en la organización de labor en las sociedades andinas, en lugar de un “sistema de mercado” o relaciones hegemónicas entre el “núcleo” y la “periferia”, como se pensaría originalmente desde el discurso occidental. La comunalidad representa un modo de vida diametralmente opuesto a la lógica individualista y la del comercio como sistema (Martínez Luna 2003:22). La comunalidad es una forma de interactuar a nivel intra/inter familiar e intercomunitario cuyas reglas son la reciprocidad y la participación en el “ejercicio del poder, en la vida económica y en la cimentación festiva y ritual de la identidad (Rendón Monzón 2003:15).
Por ende, los conjuntos arquitectónicos de Chichén Itzá, formados por templo, altar y patio-galería pudieron haber funcionado perfectamente como lugares que hicieron funcionar la “estructura social y permitieron la articulación de la vida social” (Rendón Monzón 2003:14). A pesar de que Chichén Itzá sufrió sequías severas durante el Clásico Terminal (ver Cobos et al. 2014), la maniobra en la forma colectiva de trabajo y de la participación de personas en toma de decisiones, posiblemente reforzó las estrategias económicas, orientadas cada vez más hacia el ambiente marítimo (Solano y Lazarini 2009:161). Estas estrategias pudieron involucrar la búsqueda de relaciones sociales basadas en la reciprocidad con otros grupos.
La presencia de objetos foráneos en los templos, altares y patio-galerías de Chichén Itzá parece indicar que los individuos pertenecientes a estos grupos construyeron una alianza con los habitantes de Isla Cerritos (y posiblemente con otros lugares del Golfo de México y del Mar Caribe). De esta forma, ambos sitios realizaron interacciones recíprocas y participaron en conjunto en la obtención de productos necesarios para el quehacer cotidiano, las fiestas comunales o de otra índole.
El mural hallado en el Templo de los Guerreros en Chichén Itzá representa las actividades cotidianas en el litoral marino (Fig.3). A pesar de desconocerse el lugar preciso mostrado en este mural, se aprecian distintas actividades que evidencian la posible participación de los habitantes de Chichén Itzá en tareas compartidas con las poblaciones marítimas (ver Cobos 2011). Dentro de la organización de la labor, se observan los remeros (aparentemente originarios de la costa), quienes pudieron haber intercambiado recíprocamente su conocimiento, habilidades de navegación y tecnología, por la protección que se visualiza mediante los guerreros, posiblemente enviados desde Chichén Itzá. Asimismo, las personas afiliadas a la comunalidad de cada templo, altar y patio-galería pudieron haber sido enviadas a la costa o a las islas y participar en la obtención de recursos marítimos como la sal y el pescado, dando a cambio productos como la cerámica, el sílex, la miel o las mantas de algodón. Martínez Luna (2003:22) menciona que antes del individualismo y la lógica del mercado, “la tierra, la tecnología, el conocimiento y la producción fueron resultado de una labor en conjunto”. Por ende, la presencia de Tohil Plomizo, Naranja Fino y obsidiana en los conjuntos de templo, altar y patio-galería visibiliza esta labor en conjunto y representa el lugar donde las personas pudiesen haber acudido a fortalecer la cohesión social a través de los festivos, los ritos y la toma de decisiones (Rendón Monzón 2003:15).
Consideraciones finales
Durante el transcurso del presente trabajo se ha tratado el tema de las interacciones entre Chichén Itzá e Isla Cerritos durante el Clásico Terminal. Se ha revisado la teoría y los discursos interpretativos que atendieron esencialmente el lado económico de las interacciones. Con el fin de entender las dinámicas sociales de las interacciones, se empleó la perspectiva de la comunalidad, la cual rebasa el paradigma economicista occidental de las interacciones y cuyo fundamento es la presencia/ausencia de los objetos foráneos (Agbe-Davis y Bauer 2011:13; Solano y Lazarini 2009:161). Aplicando este “modo de vida” de las culturas indígenas, se argumentó que Chichén Itzá e Isla Cerritos interactuaron en base a las relaciones recíprocas y a la organización de labor, formando así una alianza. A pesar de las sequías que afectaron a Chichén Itzá durante el Clásico Terminal, los jefes de los grupos arquitectónicos, formados por templo, altar y patio-galería, lograron maniobrar efectivamente a través de esta organización de labor inter-comunitaria que, a su vez, posibilitó el seguimiento de la vida social.
El tema de la comunalidad aún tiene perspectiva por venir y, efectivamente, requiere de una mayor teorización con apoyo multidisciplinario y de un análisis contextual más fino en Chichén Itzá e Isla Cerritos. Finalmente, es necesario preguntarse si llegó el momento de encaminarse a “otro marco interpretativo con nuevas maneras de traducir la cultura material” (Colwell-Chanthaphonh y Ferguson 2008:14), o, si se siguen repitiendo y cuestionando las mismas construcciones teóricas occidentales (ver Agbe-Davis y Bauer 2011:14; Rivera-Colazo 2011:32; Stanton y Gallareta 2001).
Agradecimientos
Gracias al apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT) y a todos los integrantes del equipo de Isla Cerritos de las temporadas de campo de 1984, 1985, 2006, 2007 y 2010 por sus valiosos aportes al estudio de esta comunidad costera. También quisiera agradecer a Dr. Rafael Cobos por sus comentarios y críticas que enriquecieron este trabajo. Por último, gracias a Jaime Martínez Luna y a Juan José Rendón Monzón por sus excelentes trabajos sobre la comunalidad, siendo éste un tema que aún espera a ser explotado por los arqueólogos.
Referencias
Agbe-Davies, Anna S. y Alexander A. Bauer
2011 Rethinking Trade as a Social Activity: An Introduction. En Social Archaeologies of Trade and Exchange. Exploring Relationships among People, Places, and Things (editado por A.Bauer y A. Agbe-Davies), pp.13-28. Left Coast Press, California.
Andrews, Anthony P.
1990 The Fall of Chichen Itza: A Preliminary Hypothesis. Latin American Antiquity 1 (3):258-267.
1998 El comercio marítimo de los mayas del Posclásico. Arqueología Mexicana 33:16-23. México.
Andrews, Anthony P.; Frank Asaro, Helen V. Michel, Fred H. Stross y Pura Cervera
1989 The Obsidian Trade at Isla Cerritos, Yucatan, Mexico. Journal of Field Archaeology 16:355-363.
Baudez, Claude-François y Nicolas Latsanopoulos
2010 Political Structure, Military Training, and Ideology at Chichen Itza. Ancient Mesoamerica 21 (1):1-20.
Bauer, Alexander A. y Anna S. Agbe-Davies
2011 Trade and Interaction in Archaeology. En Social Archaeologies of Trade and Exchange. Exploring Relationships among People, Places, and Things (editado por A.Bauer y A. Agbe-Davies), pp. 29-48. Left Coast Press, California.
Bishop, Ronald L.
2014 Instrumental Approaches to Understanding Mesoamerican Economy: Elusive Promises. Ancient Mesoamerica 25 (1):251-269.
Braswell, Geoffrey E.
1997 El intercambio prehispánico en Yucatán, México. En X Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 1996 (editado por J.P. Laporte y H. Escobedo), pp. 595-606. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala.
2009 Una historia económica de los mayas antiguos. En XVII Encuentro Internacional de los Investigadores de la Cultura Maya. Tomo 1, pp. 15-27. San Francisco de Campeche, México.
2010 The Rise and Fall of Market Exchange: A Dynamic Approach to Ancient Maya Economy. En Archaeological Approaches to Market Exchange in Ancient Societies (editado por Ch. Garraty y B. Stark), pp. 127-140. The University Press of Colorado, Colorado.
Braswell, Geoffrey E. y Michael D. Glascock
2003 The Emergence of Market Economies in the Ancient Maya World: Obsidian Exchange in Terminal Classic Yucatan, Mexico. En Geochemical Evidence for Long-Distance Exchange (editado por M.D. Glascock), pp. 33-52. Bergin and Garvey, Connecticut.
Braudel, Fernand
1995 El Mediterráneo: el espacio y la historia. Fondo de Cultura Económica, México.
Cobos, Rafael
1998 Chichen Itzá y el Clásico Terminal en las Tierras Bajas Mayas. En XI Simposio de Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 1997 (editado por J.P. Laporte y H. Escobedo), pp. 915-930. Museo Nacional de Arqueología y Etnología, Guatemala.
2001 El centro de Yucatán: de área periférica a la integración de la comunidad urbana en Chichén Itzá. En Reconstruyendo la Ciudad Maya: El Urbanismo en las Sociedades Antiguas (editado por A.C. Ruiz, J.I. Ponce de León y M.C. Martínez Martínez), pp. 253-276. Sociedad Española de Estudios Mayas, Madrid.
2004 Chichen Itza: Settlement and Hegemony During the Terminal Classic Period. En The Terminal Classic in the Maya Lowlands. Collapse, Transition, and Transformation (editado por A. A. Demarest, P.M. Rice y D.S. Rice), pp. 517-544. University Press of Colorado, Colorado.
2007 Multepal or Centralized Kingship? New Evidence on Governmental Organization at Chichen Itza. En Twin Tollans. Chichen Itza, Tula, and the Epiclassic to Early Postclassic Mesoamerican World (editado por J.K. Kowalski y C. Kristan-Graham), pp. 315-344. Dumbarton Oaks, Washington.
2010 Más allá del centro de Yucatán: Reconstruyendo el dominio territorial de Chichén Itzá en las Tierras Bajas del Norte. En VI Coloquio Pedro Bosch-Gimpera, 2010 (editado por E.O. Díaz), pp. 333-348. Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Antropológicas, México.
2011 Vida cotidiana en el litoral marino: el mural de una comunidad costera hallado en el Templo de los Guerreros, Chichén Itzá. En Vida cotidiana de los antiguos mayas del norte de la Península de Yucatán (editado por R. Cobos y L. F. Souza), pp. 209-225. Ediciones de la Universidad Autónoma de Yucatán, Mérida.
2013 Intercambio de mercado en el Área Maya. Arqueología Mexicana 122:54-61. México.
2015a Chichen Itza and its maritime ports during the Terminal Classic period. Ponencia presentada en 80th Annual Meeting of the Society for American Archaeology, San Francisco.
2015b Chichén Itzá a finales del periodo Clásico: asentamiento y cronología de una ciudad. En Arqueología en Chichén Itzá: Nuevas explicaciones (editado por R. Cobos), en prensa.
Cobos, Rafael y Terance L. Winemiller
2001 The Late and Terminal Classic-Period Causeway Systems of Chichen Itza, Yucatan, Mexico. Ancient Mesoamerica 12 (2):283-291.
Cobos, Rafael; Lilia Fernández Souza, Rodolfo Canto Carrillo, Vera Tiesler Blos, Andrea Cucina, Socorro Pilar de Jiménez Alvarez, Christopher Götz, Guillermo de Anda Alaniz y Nancy Peniche Maya
2007 Proyecto Arqueológico de Isla Cerritos: Estudio de una Comunidad Maya Costera del Clásico Terminal. Informe de la temporada de campo 2006. Consejo de Arqueología del Instituto Nacional de Antropología e Historia, México.
Cobos, Rafael; Guillermo de Anda Alanís y Roberto García Moll
2014 Ancient Climate and Archaeology: Uxmal, Chichen Itza, and Their Collapse at the End of the Terminal Classic Period. En The Resilience and Vulnerability of Ancient Landscapes: Transforming Maya Archaeology through IHOPE (editado por A.F. Chase y V.L. Scarborough), Volumen 24: 56-71. Archaeological Papers of the American Anthropological Association, Washington D.C.
Colwell-Chanthaphonh, Chip y T.J. Ferguson
2008 Introduction: The Collaborative Continuum. En Collaboration in Archaeological Practice. Engaging Descendant Communities (editado por Ch. Colwell-Chanthaphonh y T.J. Ferguson), pp. 1-32. Altamira Press, Plymouth.
Constantakopoulou, Christy
2007 The Dance of the Islands. Insularity, Networks, the Athenian Empire, and the Aegean World. Oxford University Press, Oxford.
Demarest, Arthur A.; Chloé Andrieu, Paola Torres, Mélanie Forné, Tomás Barrientos y Marc Wolf
2014 Economy, Exchange, and Power: New Evidence from the Late Classic Maya Port City of Cancuen. Ancient Mesoamerica 25 (1):187-219.
Feinman, Garry y Christopher P. Garraty
2010 Preindustrial Markets and Marketing: Archaeological Perspectives. Annual Review of Anthropology 39:167-191.
Feinman, Garry y Linda Nicholas
2010 A Multiscalar Perspective on Market Exchange in the Classic-Period Valley of Oaxaca. En Archaeological Approaches to Market Exchange in Ancient Societies (editado por Ch. Garraty y B.Stark), pp. 85-98. The University Press of Colorado, Colorado.
Fernández Souza, Lilia
1999 Análisis de una unidad habitacional de alto status: Estructura 2A 17 de Chichén Itzá, Yucatán. Tesis de Maestría, Área de Arqueología, Universidad Autónoma de Yucatán, México.
Fuente Carrasco, Mario Enrique
2012 La comunalidad como base para la construcción de resiliencia social ante la crisis civilizatoria. Polis 11 (33):1-16.
Gallareta, Tomás Negrón; Fernando Robles Castellanos, Anthony P. Andrews, Rafael Cobos Palma y Pura Cervera Rivero
1989 Isla Cerritos: Un puerto prehispánico de la costa norte de Yucatán, México. En Memorias del II Coloquio Internacional de Mayistas, Vol.1, pp. 311-332. Centro de Estudios Mayas, México.
García Moll, Roberto y Rafael Cobos
2009 Chichén Itzá. Patrimonio de la Humanidad. Grupo Azabache, México.
Garraty, Christopher P.
2009 Evaluating the Distributional Approach to Inferring Marketplace Exchange: A Test Case from the Mexican Gulf Lowlands. Latin American Antiquity 20 (1):157-174.
Hall, Thomas D.; P. Nick Kardulias y Christopher Chase-Dunn.
2011 World-Systems Analysis and Archaeology: Continuing the Dialogue. Journal of Archaeological Research 19:233-279.
Hirth, Kenneth G.
1998 The Distributional Approach: A New Way to Identify Marketplace Exchange in the Archaeological Record. Current Anthropology 39 (4):451-476.
Kardulias, Nick P.
2008 World-Systems Applications for Understanding the Bronze Age in the Eastern Mediterranean. En Archaic State Interaction. The Eastern Mediterranean in the Bronze Age (editado por W.A. Parkinson y M.L. Galaty), pp. 53-80. School for Advanced Research Press, Santa Fe.
Kepecs, Susan
2007 Chichen Itza, Tula, and the Epiclassic/Early Postclassic Mesoamerican World System. En Twin Tollans. Chichen Itza, Tula, and the Epiclassic to Early Postclassic Mesoamerican World (editado por J.K. Kowalski y C. Kristan-Graham), pp. 129-150. Dumbarton Oaks, Washington.
Kepecs, Susan; Gary Feinman y Sylviane Boucher
1994 Chichén Itza and its Hinterland. A World Systems Perspective. Ancient Mesoamerica 5:141-158.
Kristan, Graham y Jeff K. Kowalski
2007 Chichen Itza, Tula, and Tollan: Changing Perspectives on a Recurring Problem in Mesoamerican Archaeology and Art History. En Twin Tollans. Chichen Itza, Tula, and the Epiclassic to Early Postclassic Mesoamerican World (editado por J.K. Kowalski y C. Kristan-Graham), pp. 13-84. Dumbarton Oaks, Washington.
La Lone, Darrell E.
1982 The Inca as a Nonmarket Economy: Supply on Command versus Supply and Demand. En Contexts for Prehistoric Exchange (editado por J. Ericson y T. Earle), pp. 291-316. Academic Press, New York.
Martínez Luna, Jaime
2003 Comunalidad y desarrollo. Conaculta, México.
Masson, Marilyn A. y David A. Freidel
2012 An Argument for Classic Era Maya Market Exchange. Journal of Anthropological Archaeology 31:455-484.
Medina, Javier
2011 Acerca del Suma Qamaña. En Vivir bien: ¿Paradigma no capitalista? (editado por I.H. Farah y L. Vasapollo), pp. 39-64. Plural Editores, La Paz.
Mendoza Zuany, Rosa Guadalupe
2014 Indigenousness without Ethnicity in the Sierra Norte of Oaxaca, Mexico: Natives, Outsiders and Community-Based Identities. Antípoda 19:45-68.
Minch, Leah D.
2009 Style and Substance: Evidence for Regionalism within the Aztec Market System. Latin American Antiquity 20 (2):343-374.
Patton, Mark
1996 Islands in Time. Island Sociogeography and Mediterranean Prehistory. Routledge, London.
Pérez de Heredia Puente, Eduardo J.
2012 The Yabnal-Motul Ceramic Complex of the Late Classic Period at Chichen Itza. Ancient Mesoamerica 23 (2):379-402.
Rendón Monzón, Juan José
2003 La comunalidad. Modo de vida en los pueblos indios. Tomo I. Conaculta, México.
Ringle, William M.
2004 On the Political Organization of Chichen Itza. Ancient Mesoamerica 15 (2):167-218.
Rivera-Colazo, Isabel C.
2011 The Ghost of Caliban: Island Archaeology, Insular Archaeologists, and the Caribbean. En Islands at the Crossroads. Migration, Seafaring, and Interaction in the Caribbean (editado por L.A. Curet y M.W. Hauser), pp. 22-40. University of Alabama Press, Alabama.
Solano, Henry Ch. y Valeria M. Lazarini
2009 Procesos de construcción de otras alternativas: desarrollo y planteamiento de la Economía Social Comunitaria en América Latina. Revista de Economía Pública, Social y Cooperativa 66:147-163.
Stanton, Travis W. y Tomás Gallareta Negrón
2001 Warfare, Ceramic Economy, and the Itza. Ancient Mesoamerica 12 (2):229-245.
Stark, Barbara y Christopher P. Garraty
2010 Detecting Marketplace Exchange in Archaeology: A Methodological Review. En Archaeological Approaches to Market Exchange in Ancient Societies (editado por Ch. Garraty y B.Stark), pp. 33-59. The University Press of Colorado, Colorado.
Wallerstein, Immanuel
1976 A World-System Perspective on the Social Sciences. The British Journal of Sociology 27 (3):343-352.
Fig. 1: Ubicación de Chichén Itzá e Isla Cerritos y sus principales fuentes de obsidiana (Tomado de Andrews et al. 1989:356).
Fig. 2: Artefactos de sílex, turquesa y jade encontrados en Isla Cerritos (Fotografía de Andrej Vasko).
Fig. 3: El Mural del Templo de los Guerreros, Chichén Itzá (Tomado de: http://www.insightdigital.org/team/images/4/42/Chichen_T_of_Warriors_Mural_Rendering_by_Ann_Axtel_Morris_from_Fiery_Pool_catalog.jpg).